Servicios El Latino
editor@ellatino.net
WASHINGTON, D.C.- El presidente Barack Obama anunció que se dará ‘luz verde’ a los estados de la Unión Americana a cancelar varios requerimientos de la ley educativa federal conocida como No Child Left Behind Law (Que ningun niño se quede atrás).
Esta ley fue promovida por la legislatura (como un proyecto bipartidista) y respaldada en un ciento por ciento por el expresidente George W. Bush. Aunque en sus primeros años pareció operar en forma adecuada, transcurrida más de una década de su aprobación, parece no responder al sistema educativo actual, impactado por los recortes presupuestales.
La ley No Child Left Behind fue aprobada por la legislatura en el 2001, requiriendo a las escuelas públicas a reunir objetivos medibles para hacer de todos los estudiantes proeficientes en lectura y matemáticas al 2014, y de no cumplirlo las escuelas y sus profesores enfrentarían estrictas penalidades.
Sin embargo, a una década de su aplicación, el Departamento de Educación ha anticipado que más de un 82 por ciento de las escuelas del país no han cumplido con este objetivo y ya encaran penalidades que incluyen la pérdida de dinero (federal education dollars o dólares para la educación federal).
Ante todo ello, el presidente Obama y el Departamento de Educación confirmaron que la administración federal revisará la aplicación de la misma en el estado, y eliminará varios requerimientos de la ley, de acuerdo con objetivos creíbles y realizables.