Washington, 26 mar (EFE).- El equipo de campaña para la reelección del presidente estadounidense, Barack Obama, puso en marcha hoy una iniciativa para divulgar los beneficios de la reforma sanitaria de 2010, que extenderá el seguro médico a 9 millones de hispanos en pleno debate entre defensores y detractores.
La portavoz hispana de la campaña «Obama for America», Gabriela Domenzain, anunció a los medios el lanzamiento de una herramienta virtual en inglés y en español para que los usuarios se informen sobre las virtudes de la ley sanitaria, que considera especialmente beneficiosa para la población latina.
El equipo de campaña difundió hoy en un informe sus cifras sobre la reforma sanitaria, el mismo día en que los nueve magistrados del Tribunal Supremo iniciaron la vista sobre la legalidad y el futuro rumbo de esta ley.
Los demócratas calculan que unos nueve millones de hispanos que no disponían de seguro médico tendrán acceso a este servicio, si se despliega de forma completa la reforma sanitaria, y que sólo durante 2011 ya amplió la cobertura a 6,1 millones de latinos.
«Eso significa que 6,1 millones de hispanos ya no tendrán que posponer o esquivar la ayuda médica que necesitan, y ya no deberán acabar sus tratamientos antes de tiempo», detalló Domenzain en conferencia telefónica.
La portavoz alegó que actualmente el 31 por ciento de la población de origen hispano no dispone de seguro médico, lo que triplica la media de la población blanca.
La extensión de la reforma sanitaria a toda la población en 2014 supondría, según los demócratas, que personas que tengan seguro médico reciban gratuitamente más servicios, se sometan a pruebas para prevenir enfermedades y se eliminen límites de cobertura médica por parte de las aseguradoras.
El informe apunta que, antes de la reforma, 11,8 millones de hispanos tenían marcados máximos en su cobertura a partir de los cuales debían pagar la atención médica, además de los 736.000 jóvenes latinos que permanecían sin seguro.
«Hasta ahora había mujeres latinas que evitaban su cuidado médico porque se sentían culpables de gastar dinero en las consultas y en las recetas en vez de hacerlo pagando su hipoteca o comprando para alimentos», destacó ante los medios Claudia Sánchez, una enfermera convocada por la campaña de Obama.
Mientas que detractores y partidarios a la reforma laboral siguen con sus campañas, los miembros del Supremo examinan desde hoy y hasta el miércoles cuatro asuntos fundamentales sobre la constitucionalidad de la reforma sanitaria, que busca garantizar la cobertura médica universal para cincuenta millones de personas sin seguro de salud.