Washington, (EFE).- La base militar estadounidense San Antonio-Lackland, en Texas, ha acogido temporalmente a un centenar de niños que viajaban solos y fueron interceptados por agentes fronterizos, informó el Departamento de Defensa.
La Administración para Niños y Familias, que depende del Departamento de Salud, se ha hecho cargo de ellos, y ha solicitado alojo temporal en la base al Departamento de Defensa.
Los niños fueron detectados por agentes de la Patrulla Fronteriza, según indicaron las autoridades, que no especificaron cuándo fueron encontrados ni cómo entraron en el país.
Según reveló un funcionario en condición de anonimato al diario San Antonio Express-News, la división del Departamento de Salud ha tomado esa decisión ante el aumento de entrada de menores en el país.
Durante los últimos tres años, la agencia ha ayudado a unos 7.000 u 8.000 niños anualmente, pero desde el pasado octubre más de 5.000 niños han entrado en el programa de acogida.
La mayoría de los menores bajo tutela de la Administración son adolescentes varones, ocho de cada diez, y unos dos tercios proceden de Guatemala, El Salvador y Honduras, apunta el diario.
Habitualmente suelen abandonar su hogar para encontrar a algún miembro de su familia que se encuentra ya en Estados Unidos, aunque hay quienes escapan de situaciones de abuso y explotación en sus países.
Esta no es la primera vez que la base ha cedido sus instalaciones para desplazados, indica el diario, que recuerda que hace siete años uno de los edificios anexos fue utilizado para alojar víctimas del huracán «Katrina».