EL CAJÓN.- En riesgo de que en San Diego pudieran ocurrir manifestaciones similares a las que han tenido lugar en otras partes del país, luego de la muerte, en un divferendo con agentes policiacos locales, del afroamericano identificado como Alfred Olango, nativo de Uganda, hizo prender focos rojos.

Las protestas se esperaban que continuarían después de los disparos de la policía frente au hombre afroamericano de 30 años, en un centro comercial de El Cajón.

Una multitud protesta por lo que calificaron como una motivación racial, los disparos de la policía de un hombre identificado en los informes como Uganda nativa Alfred Olango el martes por la tarde formado en el lugar de los hechos en la manzana 800 de Broadway y Mollison Avenue y más tarde siguieron la jefatura de policía de El Cajón como otros tomaron participar en los círculos de oración improvisadas.

Un a manifestación “Justicia para Alfred Olango » se encontraba programada para el 9 a.m. fuera la comisaría el centro municipal manera, de acuerdo con los mensajes de los medios sociales.

De acuerdo con la versión del reporte policiaco, los acontecimientos que condujeron a la muerte del hombre comenzaron aproximadamente 14:10, cuando oficiales fueron enviados a que atendieran un reporte sobre el comportamiento de un peatón que caminaba en forma errática sobre la calle y detenía el tráfico.

Aseguran que luego entrarían en contacto con el hombre detrás de un restaurante en Broadway, al norte de la avenida norte Mollison, pero éste se negó a obedecer las órdenes de que quitara la mano de en el bolsillo, dijo el Capitán Frank LaHaye, portavoz del Departamento de Policía de la ciudad de El Cajón.

Pero “debido a que el sujeto no obedeció las órdenes, un oficial sacó su arma de fuego y le apuntó, sin dejar de darle instrucciones para quitar la mano del bolsillo, ‘sostuvo LaHaye a través de un comunicado de prensa.

Agregó que los agentes intentaron hablar con el hombre mientras caminaba de un lado a otro, pero luego «rápidamente dibujó un objeto del bolsillo delantero del pantalón, colocado tanto las manos y las extendió rápidamente hacia el oficial que tomo lo que parecía ser una posición de tiro», de acuerdo con el teniente.

Uno de los agentes disparó su arma de servicio al hombre varias veces y un segundo agente utilizó una pistola eléctrica.

Más tarde, se confirmaría el fallecimiento de Olango cuando éste fue llevado a un hospital.

La otra cara de la moneda

Los espectadores dijeron haber escuchado acerca de cinco disparos y según varios testigos, los agentes fueron excesivamente rápidos para abrir fuego y sugirieron que sus acciones fueron influenciadas por el hecho de que se trataba de una hombre negro, uno que describieron como con problemas mentales.

Asimismo, un hombre dijo a los reporteros que la víctima había sufrido un ataque justo antes del disparo, y otro dijo que tenía las manos levantadas en el momento sonaron los disparos.

Aunque algunos testigos habrían señalado que a varios testigos les confiscaron sus celulares donde tomaron videos del incidente, el departamento de policía local lo negó y en voz del jefe de policía, Jeff Davis, prometió efectuar una investigación “exahustiva y transparente”.