SAN DIEGO.- Lo que parecía una semana de esperanza, donde la carrera rumbo a los playoffs por parte de los Chargers de San Diego comenzaría a tomar rumbo y donde todas las dolorosas derrotas habían quedado atrás, nuevamente en los últimos minutos un partido controlado se va de las manos y con él casi toda esperanza de llegar a Playoffs.
En esta ocasión el villano fue el menos esperado, el mariscal de campo Philips Rivers, quien en los últimos 15 minutos lanzó cuatro intercepciones dos de ellas claves, la primera en zona roja, luego de que los equipos especiales lograron regresarle el balón a la ofensiva en la yarda 5, y la otra cuando el encuentro estaba empatado a 24 con menos de 2 minutos por jugar, y con San Diego dentro de la yarda 40 del rival, el 17 lanzó un pase que fue interceptado por Kiko Alonso y regresado a la zona de anotación entregando el partido. Decepción y enojo, son los sentimientos que inundan a los fanáticos del Equipo del Rayo, dos duros golpes en una misma semana, no solo no se aprobó la proposición C que daba los fondos para construir un estadio en el centro de la ciudad, también a pesar de quedar 6 juegos para el termino de la campaña regular de los electrizantes la postemporada se ve muy lejos porque sus principales competidores en la lucha por un comodín, Broncos y Chiefs, han encontrado la manera de sacar sus encuentros y no perder. A pesar de esto los jugadores no pierden el ánimo darán todo por ganar los 6 partidos que restan en el calendario, cualquier cosa puede pasar y pelearán fuertemente por un lugar dentro de los 6 mejores de la AFC, aseguró el receptor Tyrell Williams.
Chargers tendrá esta semana su descanso de mitad de temporada, y el coach Mike McCoy aseguró que esto ayudará mucho a los jugadores para recuperarse física y mentalmente y terminar la temporada de la mejor manera posible luchando hasta el final.
Ulises Bretón
Ellatinoonline.com