ndrés Manuel López Obrador rindió protesta como nuevo Presidente de México. Foto-Cortesía.

CIUDAD DE MEXICO.- Con la promesa de promover un programa que aliente la retención de los migrantes en su tierra de origen, mediante la generación de empleos mejor remunerados, Andrés Manuel López Obrador se convirtió en el primer presidente surgido de un partido diferente al PRI y al PAN, que por décadas habían monopolizado el poder.

El nuevo mandatario del país azteca anticipó que se fortalecerá el trabajo a favor de estos trabajadores, sobre los cuales, dijo, han dado el principal apoyo de divisas a su país ante la caída de los ingresos petroleros, un modelo que calificó como “un fracaso”.

Vale hacer mención, en este sentido, que el mismo día de toma de posesión del gobierno (el sábado 1 de diciembre), el nuevo jefe del ejecutivo federal en México firmó lo que se llama el Plan de Desarrollo Integral del Triángulo Norte de Centroamérica (que incluye a El Salvador, Honduras y Guatemala).

“Por una opción y

no por necesidad”

“Que la migración de los mexicanos sea una opción y no por necesidad”, ha sido una oferta que el gobernante mexicano ha hecho desde que arrancó su campaña electoral y que refrendó al asumir el mando.

 Terminar con inseguridad y corrupción

Por otra parte, planteando como eje central de su discurso su promesa de poner fin a la inseguridad y la corrupción que padece México, el ex gobernador tabasqueño anunció asimismo su intención de que se vuelva al régimen de zona libre en los estados de la frontera norte y que se reducirá del 16 al 8%, al precio del Impuesto al Valor Agregado (IVA) e igualar el de la gasolina al de Estados Unidos).

 “La Cuarta Transformación”: AMLO

Ante importantes jefes de gobierno e invitados de diversos países, el ex fundador del Movimiento de Renovación Nacional (MORENA), centró su discurso de toma de posesión en el recinto de la Cámara de Diputados que con el nuevo proyecto de gobierno (bautizado por él como La Cuarta Transformación) se pone fin a 36 años del modelo neoliberal, sobre el cual, dijo, ha sido ineficaz y un cobijo para la corrupción institucionalizada.

Por lo que hace a la frontera sur, del cual es nativo, dijo que es la que tiene mayor marginación en el país y anticipó que se desarrollará con la construcción del tren turístico del Istmo de Tehuantepec, además de que se alentaría en esa región, sostuvo, el desarrollo económico.

Dos discursos; mismo destinatario

López Obrador emitió, de hecho, dos discursos; uno en el recinto legislativo y otro en la plancha del Zócalo de la Ciudad de México y en ambos, dijo que al único que tiene que rendirle cuentas es al pueblo y parafraseando al revolucionario Ignacio Ramírez ‘El Nigromante”, recordó su poderosa frase: “Me hinco donde se hinca el pueblo”.

Rodeado de indígenas mexicanos, quienes ante el nuevo Presidente participaron en un ritual (sobresaliendo el tradicional empleo del incienso, el copal y las costumbres de las tribus autóctonas), reiteró lo que sería su plan de gobierno y su intención de llamar a un proceso de revocación de mandato cada dos años, para que el pueblo vote si desea que continúe o no en el gobierno.

Aunque su ascenso al poder ha sido tema de frecuentes debates y dudas de lo que podrá hacer cómo gobernante, al haber generado grandes expectativas que en opinión de muchos rebasa la realidad, Andrés Manuel López Obrador gobierna con la legitimación que le ofrecen más de 35 millones de votos de los mexicanos.


Migrantes que entraron al país, procedentes de Centroamérica y que se encuentran en un albergue en Tijuana. Foto: Horacio Rentería/El Latino San Diego.