Daños totales dejó en dos de las casas móviles el fuego. Foto: Horacio Rentería/El Latino San Diego.

CHULA VISTA.- Dos ruidosas explosiones rompieron la habitual calma matinal y despertaron a los inquilinos de Trailer Villa, en el 288 de la Broadway.

Alrededor de las 6:30 a.m. del lunes 18 de marzo, rápidamente y en fracción de segundos tras el estallido el fuego envolvió la primera de dos casas móviles afectadas, del Parque de casas moviles, que data de muchos años de operar en el 288 de Broadway Street.

No pasaron cinco minutos del estruendoso estallido (se desconocía hasta ahora la causa porque está pendiente el peritaje), cuando unidades de bomberos y del Departamento de Policía de Chula Vista, incluido una ambulancia, rodearon el sitio, mientras los apagafuegos conectaban las mangueras intentando sofocar el fuego que amenazaba con extenderse.

Una espesa estela de humo negro se levantó pronto hacia el cielo,  en el que sobrevolaba un helicóptero, y los vecinos y curiosos salieron a presenciar, a prudente distancia, el siniestro, mientras una mujer señalaba con el índice en dirección de donde se encontraba el fuego: “se oyeron dos tronidos horribles y vidrios que se quebraban”, dijo mientras charlaba con otras vecinas del lugar.

En‘la casa-traila’ donde se inició el incendio se propagó velozmente convirtiendo en cenizas los objetos y dejando sin extinguirse en el lugar sólo láminas y fierros retorcidos de lo que fue un hogar, aunque la evaluación oficial de los daños aún se encuentra pendiente.

¡Otro incendio!; evacuación en apartamentos de renta

Pero lo que pareció más extraño y sorprendente es que en forma simultánea al incendio que ocurría en tráiler villa otro siniestro inició en un área de apartamentos contiguo, de tal forma que fueron insuficientes las unidades disponibles y se solicitó el auxilio de otras unidades.

En ambos siniestros,afortunadamente, no resultaron personas lesionadas.

Acordonaron

extensa área

Frente a Trailer Villa fueron acordonadas las calles F y E  n Broadway Street,  mientras se aseguraban también los apartamentos ubicados en Woodlawn Avenue, entre F y E, llamados Woodlawn West.

La presencia de gruesas mangueras de los bomberos, varias de las cuales se encontraban agujeradas originando que el agua rodara por las calles generando charcos, era evidente mientras un agente de policía hacia indicaciones a los automovilistas que parecían ‘despitados’ acerca de lo que estaba ocurriendo aquella mañana de lunes, en un día que para los residentes y los numerosos ‘homeless’ que se observan cotidianamente en el área era inusual.

De acuerdo con la versión ofrecida por  Chris Manroe, jefe del Batallón de Bomberos de Chula Vista cuando sus elementos llegaron al sitio del incendio encontraron  “un remolque completamente afectado por el fuego y dos de los remolques adyacentes  que ya comenzaban a incendiarse”.

Los controlaron

La fuente de información también reveló que los bomberos pudieron tener el control en alrededor de 20 minutos del tiempo en el que llegaron, pero para entonces dos casas móviles ya habían sido destruidas por las llamas, pudiendo salvar una tercera, que sólo fue ligeramente alcanzada por el fuego en el frente.

Pero la cosa no terminó ahí, como coincidencia circunstancial y por lo pronto no encontramos otra explicación, alrededor de las las 7:15 a.m. se iniciaría otro incendio en los apartamentos localizados en el 200 de Woodlawn Avenue, y el cual sería sofocado a las 8:35 a.m. de ese requerido día, de acuerdo con el reporte levantado en el Departamento de Bomberos de Chula Vista.

Aunque vecinos de los apartamentos mencionaron que decenas de personas fueron evacuadas de los apartamentos y llevados a albergues, Diane Howell, vocera del gobierno de la ciudad de Chula Vista indicó que sólo tenía conocimiento de 9 personas que habrían sido evacuadas del lugar.

Un asistente del Departamento de Policía de Chula Vista abre el paso a uno de los residentes de Trailer Villa. Foto: Horacio Rentería/El Latino San Diego.
Un asistente del Departamento de Policía de Chula Vista abre el paso a uno de los residentes de Trailer Villa. Foto: Horacio Rentería/El Latino San Diego.