LOS ANGELES.- Cuando los Medias Rojas de Boston lo contrataron por 56 millones de dólares, por 7 temporadas, tal vez Adrián González fué el último en imaginar que regresaría tan pronto a California.
Este primera base nativo de San Diego y que “se hiciera” como beisbolista en las ligas de Tijuana, ya ha dejado constancia de que tiene las cualidades que se requieren para ser una estrella de este bello deporte.
Así lo demostró cuando jugó con Los Padres, con quien tuvo increíbles temporadas, pero ese éxito no lo refrendó con Los Medias Rojas, que “lo soltaron” a Los Dodgers junto con Josh Beckett y Carl Crawford, a cambio del inicialista James Loney, el pitcher Webster y el ‘infielder’ puertorriqueño Iván de Jesús.
De hecho se adelantó se trata del canje más grande en la historia de Los Dodgers, quienes pelean por el título de la división oeste con los poderosos Gigantes de San Francisco, ni más ni menos que los ganadores de la pasada Serie Mundial.
Que los Medias Rojas de Boston no tuvieron el bate que esperaban del toletero sandieguino es evidente con esta operación, pero también que ese equipo tuvo el año pasado una temporada “para el olvido” y así lo proyecta la presente, donde han podido hacer ante la contundencia de los Yanquis de Nueva York, campeones de su división.
Es la hora buena en que habrá de definirse los líderes divisionales frente a la Postemporada y al Clásico de Otoño o Serie Mundial, y parece que Los Dodgers podrían ser un uniforme que le asiente a Adrián, quien llegó a este equipo dando un tremendo “homerun” de tres carreras, acercándolos a los Gigantes.
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