Los adultos mayores con sordera pueden padecer sensaciones de soledad, aislamiento y frustración. Foto: Glam Zócalo.
Los adultos mayores con sordera pueden padecer sensaciones de soledad, aislamiento y frustración. Foto: Glam Zócalo.

SAN DIEGO.- De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud dentro de 52 años una de cada 10 personas en el mundo, incluyendo niños y jóvenes, padecerá sordera. Aquellos entre los 12 y 35 años de edad están en riesgo de perder la audición debido a la exposición alta de ruido a la que se enfrentan diariamente.

La sordera además se puede desarrollar por causas genéticas, que la mamá haya tenido complicaciones durante el parto, que tenga padecimientos infecciosos, infecciones crónicas del oído, el uso inadecuado de medicamentos y el envejecimiento.

Actualmente, alrededor de 470 millones de personas en el mundo tienen sordera, de las cuales 34 millones son menores de edad. Y se calcula que para el 2050, más de 900 millones de pacientes perderá la audición.

En el caso de los niños, el 60 por ciento que padece la discapacidad pudo haberse prevenido.

La OMS señala que las intervenciones y tratamientos para detectar, prevenir y tratar la enfermedad no son caras y traen buenos beneficios.

Si más de estos casos se detectaran tempranamente, si se diera un tratamiento adecuado y si los pacientes utilizaran buenos audífonos y otros dispositivos de ayuda, el problema de la sordera sería considerablemente menor a nivel mundial.

Aproximadamente una tercera parte de los adultos mayores de 65 años padecen sordera y la mayoría viven en Asia y África.

La pérdida de la audición puede ser leve, moderada, grave o profunda y afecta a uno o los dos oídos. Para los niveles leves y moderados se recomienda utilizar audífonos y tener el apoyo de personas que conozcan el lenguaje de señas.

Para quienes tienen el problema muy desarrollado llegando a ser grave o profundo deben pensar en utilizar los implantes cocleares, que son transductores que transforman las señales acústicas del ruido en señales eléctricas para estimular el nervio auditivo.

Las consecuencias de los niños que padecen sordera repercuten en su rendimiento escolar y vida personal. Estos pacientes requieren ayuda educativa especial.

En el caso de los adultos mayores con este problema pueden tener varias sensaciones de soledad, aislamiento y frustración, por lo que es esencial tratar de comprenderlos y ayudarlos a entender mejor para que no pierdan el control.

Algunos de los síntomas que pueden indicar que está padeciendo de pérdida de la audición son que la persona se aísle, que haya una sensibilidad al sonido o un zumbido en los oídos, y en los niños, el retraso del habla.

Según la OMS a pesar de que se recomienda el uso de los audífonos para tener una mejor calidad al oír, la verdad es que estos satisfacen menos del 10 por ciento de las necesidades en todo el mundo.

El organismo señala que los ingresos bajos, los servicios de ajuste y el mantenimiento de los audífonos son limitantes importantes para el progreso de una mejoría en los pacientes.

La Organización Mundial de la Salud agrega que una de las opciones básicas para mejorar el acceso a los servicios de lenguaje de signos es contar con el aumento de intérpretes, así como fomentar la creación de grupos de apoyo de inclusión.

Algunas recomendaciones para evitar la pérdida o disminución del sentido del oído son: Utilizar protectores auditivos en caso de exposición continua al ruido, acudir a revisión al menos una vez por año, no introducir objetos o sustancias extrañas a los oídos y por el contrario limpiárselos diariamente, evitar golpes en los oídos.

La exposición continua y alta al ruido en los jóvenes hace que pierdan la audición. Foto: Imagen Poblana.