De países tan lejanos como los localizados en Sudamérica y Centroamérica arriban a la frontera México-Estados Unidos, miles de migrantes, buscando mejor vida, y los cuales serían ridiculizados en el mencionado ‘juego de mesa’. Foto-Cortesía: 10 news.com/KGTV-TV San Diego.

SAN DIEGO.- “Un juego de mesa cruel, hiriente y humillante sobre la migración como parte de un proyecto que fue aprobado por un maestro del  Oceanside Unified School District, OUSD, (Distrito Escolar Unificado de Oceanside)” y que ‘jugaron’ estudiantes de Cesar Chavez Middle School.

Ante el mismo reaccionaron en estos términos de desaprobación, egresados del Distrito Escolar Unificado de Oceanside, así como miembros de Human Rigths Council of Oceanside, (HRCO) o Concilio de Derechos Humanos de Oceanside y de la organización activista MEChA de Mira Costa.

“Este juego de mesa consistía en jugadores que compiten entre sí para cruzar la frontera y alcanzar una bandera de Estados Unidos, mientras se deportan entre sí durante el desarrollo del juego”, consideraron las estudiantes y activistas Karen Plascencia, Karina Martínez, de (Human Rigths Council of Oceanside, HRCO) y Carolina Muños de la organización MEChA de Mira Costa.

Burla de los problemas sociales

El formato de un juego de mesa, hace que los problemas serios, como las políticas históricamente racistas, parezcan apolíticos y entretenidos, al tiempo que se burlan de las condiciones sociales que enfrentan las familias trabajadoras migrantes en nuestra comunidad”, indicaron.

Agregan: “Muchos niños, en nuestro distrito de Oceanside, provienen de familias de estado mixto y se han visto perjudicados por las políticas y prácticas que separan a las familias y separa a los niños de sus padres mediante el retiro físico forzoso de las comunidades en las que vivimos”.

Sostienen en este sentido que “este juego de mesa refuerza una cultura de competencia en lugar de la solidaridad y el trabajo en equipo de enseñanza, hace que las políticas y prácticas políticas históricas y de supremacía blanca parezcan humorísticas e inocentes”.

“No es un incidente aislado”

“Esto no es un incidente aislado. Es parte de un patrón de negligencia y refleja la desconexión y el desprecio del distrito por la comunidad a la que se supone que deben servir. Las políticas y la falta de responsabilidad directa y negativa afectan y expulsan a los estudiantes de color, que son la mayoría de los estudiantes de OUSD. Esto no es una sorpresa para nosotros, que somos ex alumnos de OUSD y hemos experimentado de primera mano la hostilidad y el abandono por parte del distrito”, afirman.

Buscarán entrevista

con Superintendente

Y rematan, dejando clara su postura: “Los miembros de la junta directiva de OUSD y el personal tienen la responsabilidad de garantizar un ambiente seguro y acogedor para todos los estudiantes. Permitir tales expresiones grotescas de nacionalismo blanco en la educación pública, es una afrenta a la dignidad humana básica de todos los estudiantes que asisten a OUSD”.

Anticiparon que buscarán ser recibidos en una cita por la actual Superintendente de OUSD,  Julie A. Vitale, que tienen prevista para el 31 de octubre próximo, en donde plantearán diversas demandas tendientes a poner fin a este tipo de incidentes.