Momento en el que dos jovencitas develan el esperanzador escrito. Foto: Horacio Rentería/El Latino San Diego.

SAN DIEGO.-  Durante mucho tiempo el Padre Joe y ahora Diácono Jim Vargas, quien preside y administra las instalaciones de Father Joe’s Villages, han coincidido en que la única fórmula real para lograr una verdadera solución al fenómeno social que representa el fenómeno social de Homelessness es que estos hombres y mujeres vivan en residencias permanentes y no sólo en albergues temporales, pues este ha generado un circulo vicioso tanto en la ciudad como en el condado de San Diego.

¿Realmente tiene solución este problema, en su opinión?,  preguntamos al Diácono Vargas, en una entrevista que ofreció a El Latino San Diego en la segunda semana del 2018  y su respuesta fue categórica: “estoy convencido que la solución es la construcción de vivienda accesible a los pobres. Sin tener eso, nunca vamos a poder atender la cantidad de personas que están en las calles. Y no solamente como organización, sino como comunidad.

La solución, definió entonces, es que las instituciones pública y privadas (especialmente empresas, organizaciones no lucrativas y fundaciones) trabajen en conjunto con los miembros de la sociedad civil no elaboren un plan formal para buscar sitios de residencia permanente y no sólo temporal; en tanto se actúe con sensibilidad y realismo  el fenómeno social de Homelessness continuará en la ciudad y el condado de San Diego.

“La Esperanza Vive Aquí”

Por eso fue relevante para la ciudad de San Diego la ceremonia de inauguración (la tarde del martes 7 de enero), del primer proyecto de vivienda accesible que lleva a cabo San Diego Housing  Commission y Father Joe’s Village, en el que las instalaciones de un antiguo motel se convertirán en 82 unidades de vivienda para personas que viven como ‘homeless’.

De hecho, esta es la primera ocasión en la historia de San Diego en que una organización gubernamental y una organización privada no lucrativa toman parte en un proyecto de esta envergadura.

Y es que para lograrlo, se requirió una inversión conjunta de 24 millones de dólares, para la adquisición del terreno y las unidades del llamado  Motel 8, incluidos los 3 millones aportados por la fundación Benson Family Foundation, una organización no lucrativa con sede en La Jolla, California fundada por Roger y Judy Benson, una pareja de gran sentido altruista.

El momento en el que del techo del motel bajó una manta de 17 pies de alto con un mensaje esperanzador: Hope Lives Here (La Esperanza Vive Aquí), arrancó los aplausos de los asistentes al histórico evento, pero también de que algún día el sueño de que  las ciudad de San Diego y las del resto del condado se convertirá en una ciudad en el que el 100% de la población tenga un techo en donde vivir, lo que ahora se ve como un sueño difícil de ser realidad.

La realidad, en las

calles y banquetas

Y es que a principios del 2019, el año que recién terminó, las cifras mostraron que 8 mil personas deambulaban arrastrando carritos del mercado lleno de ropa, cobijas y víveres por calles o dormían en banquetas y jardines de alguna de las 18 ciudades del condado de San Diego, mientras  unas 4 mil dormían a la intemperie y unos 1,000 se encontrarían en albergues temporales.

El propio Diácono Vargas,  quien en compañía de Richard C. Gentry, presidente y CO de San Diego Housing Commission, fueron los oradores del breve evento que marca un antes y un después en los proyectos para hacer frente a esta impactante realidad social.

Sólo una quinta parte

El entrevistado es un convencido que debido a que estas personas “no tienen suficiente ingreso y sin contar que el Condado de San Diego no tienen suficientes habitaciones accesibles para rentar, por eso es que el año pasado anuncié que Joe’s Father Villages, en cuatro o cinco años, vamos a construir 2,000 habitaciones; es decir, viviendas para personas que se encuentran en las calles”.

El primer paso ya se ha dado, y Vargas espera poder hacerlo en los proximos 3 o 4 años, aunque ello sólo representaría una quinta parte frente a la demanda que representan las cerca de 10 mil personas sin techo en San Diego, ciudad que se encuentra en el nada halagüeño cuarto lugar entre las ciudades con más ‘homeless’, sólo por detrás de Nueva York, Oregón y Los Ángeles.

Richard C. Gentry, presidente y CEO de San Diego Housing Commission. Foto: Horacio Rentería.

Diácono Jim Vargas, presidente de Father Joe’s Villages. Foto: Horacio Rentería.