Imágenes del condado de San Diego ahora que se han implementado medidas que obligan a los residentes a quedarse en casa de 10:00 p.m a 5:00 a.m.
El condado de San Diego inició un toque de queda para y tratar de controlar un peligroso rebrote de Covid 19, mientras la pandemia rebasó en Estados Unidos simultáneamente las marcas de un cuarto de millón de muertes y 200,000 nuevos contagios en 24 horas, de acuerdo con cifras de la Universidad John Hopkins.
En solo fracciones de cada segundo se registra un nuevo caso positivo. Más de 12 millones de personas se han contagiado, y el último millón se completó en menos de una semana.
El coronavirus cobra más de 1,500 vidas diarias; hay días que roza las 2,000 fatalidades.
El ritmo de contagios y fatalidades por la pandemia es el más elevado desde que se registró el primer caso de Covid 19 en Estados Unidos.
Al mismo tiempo surgen esperanzas por las noticias de las farmacéuticas Pfizer y Moderna sobre la eficiencia de más de 95 por ciento en sus vacunas en desarrollo.
Ejecutivos de Pfizer dijeron a la Radio Pública Nacional (NPR) que esperaban pedir este viernes permiso de emergencia a la Administración de Alimentos y Medicamentos para planear la distribución de su vacuna.
Pero mientras el remedio comienza a llegar primero a quienes más lo necesitan, el Instituto de Métricas y Evaluaciones de Salud (IHME) de la Universidad de Washington, que se ha caracterizado por los pronósticos más acertados, advirtió que el país puede registrar casi cien mil muertes más en escasos tres meses.
Estados Unidos se perfila para llegar a las 344,000 muertes antes del primero de marzo, cuando se estima que la vacuna comenzaría a circular por el país.
El Centro para el Control de las Enfermedades (DCD) pronosticó por su parte que en las próximas tres semanas Estados Unidos registrará 48,000 muertes más.
En el frente político las perspectivas son igual de desalentadoras. Mientras que en menos de cada minuto se registra otra muerte por Covid 19, el presidente saliente, Donald Trump, impide que el presidente electo, Joe Biden, tenga acceso a la información oficial sobre la pandemia.
En un caudal de mensajes de Twitter para intentar desvirtuar las elecciones, el presidente Trump ha hecho solo un par de menciones al Covid 19, sin reconocer la pandemia como una crisis de salud nacional.
Biden llamó irresponsable la actitud del presidente y dijo que, cuando su gobierno tome posesión, enfrentará un retraso de semanas, quizás meses, antes de que tenga una estrategia eficiente para detener los altos índices de muertes de estadunidenses.
Sin una estrategia nacional durante la administración Trump, los estados comienzan a imponer medidas sin precedentes para enfrentar el también inusitado crecimiento de la pandemia.
El estado de California “jaló el freno de emergencia” a la reapertura económica por le disparo de contagios, según el gobernador Gavin Newsom, que coloreó con el peligroso tono de alerta púrpura a casi todo el estado.
Como consecuencia, esta semana entró en vigor un toque de queda que continuará por lo menos hasta el 21 de diciembre.
Los 40 millones de californianos, incluidos 3.6 millones en San Diego, solo pueden salir de sus casas si usan mascarillas, y ahora tienen prohibido andar en la calle entre las 10 de la noche y las 5 de la mañana, si no es por motivos esenciales.
La mayoría de los negocios solo pueden operar al 25 por ciento de su capacidad y únicamente en exteriores.