Diariamente, millones de menores en Estados Unidos se conectan a videojuegos en línea. Foto José Antonio Avilés

SAN DIEGO.- Alejandro es un niño de 8 años edad que pasa más de 3 horas al día jugando videojuegos en línea a través del celular de su padre.

 “Me gustan los juegos de carreras, de misiones y hago tik toks”, señaló el pequeño ciudadano de San Diego.

Estadísticas oficiales señalan que más de la mitad de los niños como Alejandro en Estados Unidos son usuarios de plataformas de juegos en línea y la mayoría de ellos son menores de 16 años. 

Todos los días, millones de menores se conectan para jugar y crear un mundo divertido y emocionante pero no siempre los participantes en línea tienen ese propósito. 

Las horas de diversión para Alejandro se podrían convertir en momentos peligrosos sin la supervisión de sus familiares. 

“A mi me preocupa que vea cosas no aptas para su edad”, señaló el señor Ernesto, padre del pequeño Alex.

La preocupación no solo es de los familiares porque el Buró Federal de Investigaciones (FBI por sus siglas en inglés) ha detectado personas que pretenden realizar abusos con el contenido que llegan a compartir en línea los menores. 

Agentes de inteligencia del FBI han notado que los llamados “abusadores sexuales” usan plataformas populares de juegos en línea para entrar en contacto con ellos y tratar de victimizarlos. 

Las investigaciones han revelado que los ciberdelincuentes se contactan con niños en los sitios en línea a través de chats o comunicaciones de voz para convencerlos de que cambien a otras aplicaciones de redes sociales para obtener un mayor acceso a su contenido personal. 

La mayoría de los sitios de juegos no permiten el intercambio de fotos o videos por ello cuando cambian a una red social algunos ciberdelincuentes presionan al niño para que envíe fotos y posteriormente exige imágenes más comprometedoras.

Los padres deben saber que hay personas peligrosas en línea pero existen formas de proteger a sus hijos.

CONFIGURACIÓN 

Todos los teléfonos celulares y tabletas digitales tienen funciones que permiten a los padres o tutores controlar y restringir el uso del aparato electrónico.

Algunas de las configuraciones que se pueden editar para brindar seguridad son: 

— Limitar la cantidad de tiempo de uso en el dispositivo móvil y evitar el acceso nocturno.

— Configurar parámetros para que el menor solo pueda descargar aplicaciones apropiadas para su edad. 

— Bloquear  sitios web para adultos. 

— Desactivar los servicios de ubicación del dispositivo. 

Recientemente el FBI lanzó una campaña llamada “No es un juego” la cual  no pretende alejar a los menores de los juegos en línea pero promueve que  los adultos aprendan configuraciones de seguridad en los dispositivos y hablen constantemente con sus hijos sobre los riesgos de la red. 

Si cree que algún menor puede ser una víctima de delito cibernético o si conoce a alguien que lo sea, puede comunicarse al FBI al 1-800-CALL-FBI o reportarlo en línea en tips.fbi.gov . jose