foto de la promotora de humo de tercera mano, Gloria Salas
Gloria Salas recibe un Certificado de Participación al término de un curso de Promotoras sobre Humo de Tercera Mano. Foto-Cortesía.

NATIONAL CITY.- Gloria Salas es una promotora de la salud con alrededor de 30 años de actividad, que heredó el gusto por ayudar a los demás de su madre, Rosa María, y la genética de los abuelos.

“Era muy bonito verla trabajar (en Tijuana). Inclusive yo ni sabia que me iba a pasar ese Don mi madre. De repente empecé a trabajar con la comunidad. Al ver las necesidades que había en las comunidades en los lugares”, recordó en entrevista con El Latino San Diego.

“Después me vine  para acá y empecé (al sur del condado de San Diego, la mayor parte en National City) a trabajar con un programa que se llamaba Por la Vida, un programa que alcanzaba a muchas mujeres que no tenían educación, que no tenían preparación de la vida y en ese programa dabamos clases y enseñabamos cosas muy básicas, que a veces ni siquiera ellas sabian”, dijo.

Ha participado en más de una decena de programas de salud

Salas ejemplificó que en programas comunitarios como “Por la Vida”, cerca de 80 promotoras de salud participaban en un proyecto conjunto en el que se conectaban con la familia, la comunidad e invesigadores de alto nivel, completando la cadena que se requería para aterrizar un programa con verdadera utilidad para las personas.

“Nosotras llegamos a ir a Washington, DC., y ahí nos dij uno de los que estaban dando sus discursos: “Ustedes son personas muy importantes en nuestra comunidad, porque sin ustedes no podemos hacer nada y ustedes traten de exigir que se les pague, que se les de dinero o algo, porque aquí mucha gente se beneficia de todo lo que ustedes hacen”.

La entrevistada detalló en el mismo sentido que “trabajamos en casi 15 programas” y se refirió a la detección del cancer de seno, solo por mencionar alguno de ellos, “también estuvimos en Washington con una directora porque se vino como una epidemia de eso, y sigue pero se han abierto muchos servicios que han sido de mucha utilidad”.

¿Cuántas de esas mujeres promotoras habrían seguido en el segundo programa, que es el que nos acaba de mencionar, que es el del cancer de seno?, se le preguntó

“Bueno, participamos”, indicó Salas, “en muchos programas de salud como el que se llamaba “Es difícil ser mujer”,  dirigido a las mujeres que se dejan que (sus esposos, sus hijos o su familiares) las manipulen para que tengan más carácter”.

“La mayoría todavía seguimos”

“La mayoría todavía seguimos; la mayoría todavía somos personas mayores”, subrayó, “pero aún así con lo que nos dan nuestras fuerzas, seguimos adelante y muchas de ellas han progresado tremendamente porque nos dieron clases especiales para hacer nuestra High School y personas poco más jóvenes que nosotras tienen muy buenas posiciones gracias a las oportunidades que tuvieron como promotoras de la salud”.

Hoy Gloria participa en el Programa del “Humo de Tercera Mano”.

El humo de primera y segunda mano

Explicó que en esta crítica cadena que comenzó con el llamado humo de primera mano, en el que las personas reciben directamente el humo como sucede en el caso de un matrimonio o noviazgo en el que uno de los dos fuman, pues vivir “con una persona que fuma (el impacto a los pulmones) es como si la otra estuviera fumando”.

Pero es aún mayor el riesgo en llamado “humo de segunda mano, pues mucha gente ha muerto sin haber nunca fumado; así de grande es el daño que se hace a una persona que está cerca de ellos fumando; es cuando su vecino (a) fuma, y el humo llega porque llega y ni cuenta se da.”, dijo.

Pero por si esta cadena de adicción al tabaco no fuera ya suficientemente peligrosa para la salud y la vida de las personas, “El de tercera mano, hace 20 años que estuvieron los fumadores y se quedó el humo ahí y tu no lo ves”.

Por fortuna, agregó Gloria Salas, “tenemos un experimentó que están trayéndonos estudiantes de la Universidad, que vienen y pican la pared y los objetos y pueden determinar el tiempo del fumador”.

“Son químicos concentrados”

“Lo malo que no es el humo el que está ahí, es algo peor que el humo, son químicos concentrados, que ahora tienen mucho más peligro”, insistió.

Dijo que entre las pocas opciones disponibles para tartar de contrarrestar el daño causado por el humo de tercera mano sería cambiar la  la alfombra, los drywells y en general las áreas donde se percibe el olor o sospecha de que se consumió tabaco.

Uno de las reacciones que suelen tener los fumadores es que sin estar conscientes del daño que causan al hacerlo, es que se suelen ofender o molestar con las personas que les piden que se vayan a otros sitios a fumar, destacó.

Pero la cadena de seguimiento se vuelve de tercera mano,en la que se refleja que hace 20 años o más,que estuvieron él o los fumadores y se quedó el humo ahí y tu no lo ves.

¿Entonces estamos hablando, volviendo a las cadenas, la primera cadena resultó ser menos peligrosa que la segunda y la tercera mucho más riesgosa que las otras dos?, le insistimos.

“Afecta a los niños”

“Así es. Especialmente la tercera porque afecta mucho a los niños, a las mascotas, los sofás todos se impregna. Los juguetes de los niños están impregnados. Entonces son niños que están ya con problemas respiratorios”.

“Estoy tratando”, agregó, “de llevar el mensaje a donde sea, así nos dijeron en el programa; podemos hacerlo por facebook, por whasup, por teléfono, por el medio que sea. Entonces yo empecé a mandar los folletos, la información. Tenemos varios grupos ahí y me gusta más que facebook. No sé cuánta gente lo leyó pero yo lo mandé”.

Mucha gente aprendió porque los abuelos fumaron toda su vida.

“Esto desafortunadamente se convirtió en ‘una escuela’ (muy dañina para ). Una de mis amigas me dijo: Yo le prendia los cigarros a mi papa. Ella tenía como 7 u 8 años y hasta la fecha fuma y tiene más de 80”.

¿Cómo tratan de ayudar a la gente?

“Bueno”, respondió, “otra lección muy buena que tuve es que también hacemos grupos e hice un grupo con las familias y platicamos todo sobre el tema y damos toda la clase. Cuando estábamos hablando sobre el tema, una de las señoras acababa de tener un nieto y dice que le recordó todo lo de esta clase, porque ahora están hacienda que los papás agarren una clase sobre el  daño que produce el cigarro”.

¿A quiénes  les recomendaría que tomen esas clases?, cuestionamos

“Bueno, en realidad a todo mundo”

¿Pero cuantos las toman?

 Pues no la toman. Nosotras tenemos que esforzarnos y llevarles las hojas. Ahora las cosas han ido peor porque ahora no solo es el cigarro , son esas pipas horribles que usan, son ese perfumado de humo, que son como ocho tipos diferentes; están peor que el cigarro”.

¿Es muy importante eso que acaba de decir porque seguramente se enteró que en California se acaba de iniciar un programa sobre el perfume y el sabor en el tabaco?.

“Viene impregnado”

Es horrible. Viene impregnado y resulta ser por mucho, peligrosisimo, más que el cigarro, porque son muchos más químicos.

Pero al final de cuenta también ¿es tabaco, no?

Sí es tabaco”, puntualizó Gloria,  “ahí en las hojitas que le mandé iban como seis cosas (tipos diferentes. Ahí se ve lo que usan ahorita el de humo, el de la pipa, según esto se paró el cigarro pero mejor lo hubieran dejado. Los jóvenes lo consumen, desde la primaria, su adicción, especialmente de la marihuana, cien por ciento seguro. Si as persona tiene que taparse la boca, igual que la pandemia, no por usted sino por las demás personas, igualmente el cigarro. Se tienen que cuidar de no estar en lugares cercanos o fumar”.

“Es igual de fatal que el COVID-19 y en el cigarro no hay vacuna ni nada.

Depende de la salud de la persona, si tienen diabetes, alta presión, es una presa fácil”, advirtió esta Promotora de la Salud con alrededor de tres décadas de experiencia.

¿Y cómo trabajan las promotoras del programa de humo de tercera mano?

“Tenemos una Coordinadora con la que nos juntamos cada semana para ver qué es lo que hemos hecho, evaluaciones, tenemos que presentar reports. Nos dan entre 50 a 70 hojas para repartir con la información. Lo cual lo podemos hacer con una clase con grupo de 10 personas, pero si no tenemos ese grupo podemos repartirlos en los parques, en las tiendas, donde quiera, etcétera”, dijo .

Y concluyó el motivo que la impulsa a realizar su tarea de promotora, que “no siempre nos han dado incentivos”:

“No siempre se nos ha dado incentivos. Pero les somos muy útiles y nosotros lo hacemos porque nos gusta, porque amamos a nuestra gente”.

fotografía de Gloria Salas
Gloria durante la entrevista con El Latino San Diego. Foto: Horacio Rentería/El Latino San Diego.

Para mayor información acerca del humo de tercera mano y de la labor que realizan las promotoras de salud, comunicarse al correo electrónico: salasgloria002@gmail.com.