(Henrik Rehbinder).- La sesión legislativa que acaba de terminar en Sacramento fue productiva en la elaboración y aprobación de medidas para limpiar el aire, especialmente en las comunidades de minoría de San Diego en donde se halla la peor contaminación ambiental.


Una cantidad de proyectos ambientales relacionados con el aire, el agua,
el viento y transporte, todos ligados a la concreción de un medio ambiente
limpio, que especialmente afecta al sur de California. Están a la espera de
la promulgación del gobernador Newsom. 


Cabe destacar entre ellas la AB 126 de la asambleísta Eloise Gómez
Reyes y la senadora Lena González ya que tendrá un impacto directo en el
aire que respiran los residentes de California, al contribuir a reducir la
contaminación, producto directo de la emisión de camiones y vehículos de
transporte. 


El área de San Diego conoce muy bien ese problema. La emisión
permanente de gases tóxicos procedentes del tránsito de camiones diésel
en las autopistas y en los depósitos industriales es la responsable de que
el Barrio Logan, junto a National City, tengan los mayores índices de asma
de California.


Precisamente, el Barrio Logan, de mayoría latina, está en el 5% de las
zonas más contaminadas de California, según la Environmental Health
Coalition. Sus residentes tienen entre un 85 y un 95% más de
probabilidades de desarrollar cáncer que en el resto del país. Un camión
de transporte con energía alternativa sería bueno para la salud y la
economía.


Un camino para lograr esa meta es la AB126. La medida autorizará
aproximadamente 170 millones de dólares anuales durante la próxima
década en apoyo del Programa de Transporte Limpio de California.  

Este es un aumento en el pago de tasas que, en concreto, financiará
incentivos a vehículos de emisiones cero, cargadores de vehículos
eléctricos y estaciones de servicio de hidrógeno a través del Programa de
Mejora de la Calidad del Aire, el Programa de Transporte Limpio y el
Programa de Modernización Mejorada de Flotas. 


El común denominador de estos programas es promover un aire limpio y
comunidades saludables, al tiempo que ayudan a más familias y pequeñas
empresas a poder estar al alcance de vehículos limpios. 


Estos programas también ayudan a retirar los coches más viejos y
contaminantes, proporcionan apoyo para la compra de camiones de cero
emisiones y la infraestructura necesaria -como los cargadores- para
apoyar la transición.


La fuerza de la AB 126 es dar prioridad a la equidad exigiendo que la
Comisión de Energía de California destine al menos el 50% de la
financiación del Programa de Transporte Limpio a proyectos que
beneficien directamente a las comunidades “desfavorecidas”.


Los residentes de San Diego siguen de cerca el futuro de la AB126, el
gobernador tiene hasta el 14 de octubre para firmar la ley. La medida es
fundamental para seguir avanzando en la meta de limpiar el aire para las
comunidades latina perjudicadas por el elevado tránsito de camiones. Es
un financiamiento de programas importantísimos y complementarios. 


 Los legisladores hicieron su parte en continuar el camino hacia la energía
renovable con la aprobación de los proyectos, ahora es el turno de
Newsom de demostrar cuán real es su compromiso con el medio ambiente
dando su visto bueno al paquete de leyes ambientales aprobada esta
sesión.