Los Ángeles, (EFE).- Activistas pidieron al Gobierno que transforme el TPS en residencia permanente durante un acto en que en el que el Concejo de Los Ángeles declaró el 24 de marzo como el día del fenecido arzobispo salvadoreño Oscar Arnulfo Romero.

«Todos los años, desde 2005, el concejo de Los Ángeles junto al Comité de Hermanamiento San Salvador y Los Ángeles honra la memoria de monseñor Romero declarando el 24 de marzo como su día», dijo a Efe Carlos Vaquerano, director del Fondo Salvadoreño Americano para la Educación (SALEF).

«Y hoy las organizaciones que defendemos los derechos de los inmigrantes anunciamos el lanzamiento de la campaña por la residencia permanente para salvadoreños, hondureños y nicaragüenses beneficiarios del Estatuto de Protección Temporal (TPS)», reveló.

En acto en la sala de sesiones del concejo municipal de Los Ángeles, Ed Reyes, concejal del distrito 1 donde se encuentra «la pequeña Centroamérica», dijo que la resolución firmada por todos concejales «es un reconocimiento a la memoria de Monseñor Romero».

Oscar Arnulfo Romero y Galdámez era el arzobispo católico de San Salvador, El Salvador, cuando el 24 de marzo de 1980 fue asesinado de un balazo en el corazón por un escuadrón anticomunista cuando oficiaba misa en la capilla del hospital para enfermos de cáncer La Divina Providencia en la capital salvadoreña.

«Monseñor Romero era el líder espiritual de los católicos salvadoreños que cuando comenzó en el sacerdocio se le conocía como alguien conservador», contó Vaquerano.

«Pero después de convivir con la gente pobre y al haber sido afectado directamente con el asesinato de sus hermanos sacerdotes el cambió su forma de pensar y se lanzó a la lucha por los derechos humanos de los pobres», indicó.

Vaquerano aseguró que si Monseñor estuviera vivo no estaría de acuerdo con la injusticia que comete el gobierno de Estados Unidos al no brindar facilidades para obtener documentos que facultan todos los derechos legales a los pobres de la misma manera en como sí las ofrece a los ricos.

«Estamos seguros que junto a nosotros Monseñor estaría exigiendo que después de más de 10 años de que los centroamericanos han estado trabajando con TPS que ese documento se les transforme en residencia permanente», aseguró.

Angela Sambrano, presidenta de la junta directiva del Centro de Recursos Centroamericanos (CARECEN), dijo a Efe que durante la guerra civil salvadoreña, que comenzó en 1980 y terminó con un acuerdo de paz en 1992, en EE.UU. había una diferencia entre el gobierno estadounidense que apoyaba al gobierno salvadoreño y el pueblo estadounidense que apoyaba a los refugiados del conflicto.

«Aquí las iglesias crearon santuarios para refugiados salvadoreños donde los recibían; pero hoy los salvadoreños son una parte muy importante del desarrollo social, económico y político en muchas ciudades estadounidenses como Los Ángeles», aseguró Sambrano.

«Y que el concejo municipal reconozca el día de Monseñor Romero es reconocer la contribución que los salvadoreños hacen al desarrollo de esta ciudad y con ello de Estados Unidos», subrayó.

Martha Arévalo, directora interina de CARECEN, dijo a Efe que actualmente los beneficiarios de TPS a raíz de la protección brindada después del huracán Mitch en 1999 en Centroamérica son 60.000 hondureños y 3.000 nicaragüenses.

Otro grupo es el de los salvadoreños quienes tras dos terremotos que afectaron a su país en los primeros meses de 2001 fue extendido un TPS con el cual se han beneficiado alrededor de 204.000 personas.

Por su parte, la salvadoreña Evelyn Hernández, beneficiaria del TPS, dijo a Efe que desea que después de 10 años de poseer un permiso de trabajo temporal se pueda comenzar a tramitar la residencia permanente.

«Cada vez que hay que renovar el TPS nos encontramos con que se nos desajusta el presupuesto familiar para pagar la renta, recibos, la comida y uno va a perder tiempo en los trámites», contó Hernández.

«Por eso yo deseo que todos los centroamericanos que tenemos TPS ganemos la residencia permanente para luego esperar nuestro tiempo para ser ciudadanos y poder votar», finalizó.