SAN DIEGO.- Haber servido por siete años en el ejército de Estados Unidos y tener “un mínimo récord criminal” fue suficiente para que un juez federal fijara 26 años de cárcel, a un soldado retirado de Camp Pendleton, Brian Karl Brimager), quien mató a machetazos a su ex novia y obstruyó con mentiras a la justicia.

Con evidente tristeza la familia de Yvonne Baldelli, no pudo ocultar su sentimiento de frustración e impotencia a la salida del juzgado, pues en voz del padre de la joven solicitaron cadena perpetua para ex militar de Camp Pendlenton, quien –de acuerdo con el expediente judicial- desmembró , a finales del 2011, el cuerpo de la mujer y lo ocultó en la selva de Bocas del Toro, Panamá.

“No importa que tan atroz es este crimen, este es un hombre que ha servido al país por siete años y e hizo numerosos viajes, incluido Iraq y Fallujah donde el luchó por su país”, resolvió el juez ante el desencanto de los miembros de su familia.

‘Ese monstruo no tuvo ningún remordimiento y hasta el último segundo pidió perdón; merecía estar en la cárcel de por vida, porque torturó, golpeó y deshizo el cuerpo de mi hermana, a ella y a sus perritos”, dijo descorazonada Michelle Faust, quien rindió testimonio en la audiencia resolutiva del miércoles 25 de mayo.

La hermana de Yvonne fue confortada por su padre James Faust al salir de la corte quien tomó de la mano a su hija y se dirigió a la conferencia de prensa y quien dijo, sin maquillaje: “es un asesino”.

‘Un poco de sentido”

Luego de que intervinieran en la conferencia de prensa varios miembros de la familia de Yvonne, lo hizo la Procuradora (Federal) para el Distrito Sur de California, Laura Duffy quien acompañada de los dos fiscales (parte acusadora), quien consideró que la sentencia “trajo un poco de sentido de cierre de su familia”.

Durante el juicio que se siguió al ex militar retirado Brimager se evidenció que después de haber dado muerte a la muchacha, éste “obstruyó la investigación sobre el asesinato Baldelli al destruir pruebas, incluyendo un colchón manchado de sangre, su perro, y ropa y joyas”, de acuerdo con su declaración de culpabilidad.

Engañó a la familia y usaría

cuenta bancaria de Yvonne

Por si no fuera suficiente, se indicó, “Brimager también envió correos electrónicos falsos de la cuenta de Yvonne Baldelli a sus amigos y la familia después de su muerte, en el que se hizo pasar por ella, retiró dinero de su cuenta bancaria en Costa Rica e hizo declaraciones falsas a un agente federal que investigaba acerca de la desaparición de Yvonne, para que pareciera como si ella aún estuviera viva y viajar con otros nombres”.

Cabe hacer mención que la familia de la víctima, según afirmó, Michelle Faust, es totalmente de raíces latinas, pues comparten sangre puertorriqueña y mexicana, y hablan perfecto español.