SAN YSIDRO.- Andrea Skorepa, una mujer nativa de San Ysidro, producto genuino de esa comunidad y para la que ha trabajado gran parte de su vida, se jubilará a partir del próximo 5 de agosto.

En entrevista con El Latino San Diego, la directora de la Casa Familiar, recuerda que ella asume ese cargo en 1980, en una población muy diferente a lo que es ahora.

Para Skorepa la orfandad de San Ysidro siempre ha prevalecido, pues para el gobierno de la ciudad de San Diego ésto no era más que un barrio.

“No era cosa de apariencia”

Transcurridos 36 años de que se retirara de sus funciones en el Distrito Escolar de San Ysidro, para dedicarse de lleno a esta nueva encomienda, recuerda que muchos la menospreciaron, pues pensaron que sería incapaz de organizar la Casa Familir.

“Era la Casa de los Pobres del Condado de San Diego y lo que me quedaba claro es que había muchas personas con necesidad; no era cosa de apariencia sino de trabajo”, diagnosticó convencida.

Pero también en lo financiero la nueva directora se enfrentaba a un gran desafío, dijo, pues a su entrada le habían recortado el 50% del presupuesto que se orientaría otras prioridades como salud.

Aún así, la clave era “organizarnos” para utilizar de la mejor manera posible los escasos recursos disponibles.

Las dos caras de SY

Recuerda que uno de los sucesos que mostraron lo mejor y lo peor de ese San Ysidro fue la masacre ocurrida en McDonald’s en 1984, y la mejor prueba fueron los $500,000 que donó para apoyar a las víctimas la altruista señora Joan Croac. Dijo que esta cantidad correspondía a los hijos de las víctimas, pero al ver el dinero, familiares de ellos no faltaron quienes querían que se les entregara, lo cual no lo permitió.

Entre las acciones emprendidas de las cuales se muestra orgullosa como directora es el haber impulsado un estudio sobre el impacto sobre los automovilistas sobre la contaminación ambiental generada por los vehículos que tienen que esperar horas para cruzar de Tijuana a San Diego, a través de la garita de San Ysidro.

“Me parece increíble que no se hubiera hecho antes”, afirma, aunque reconoce que ni la Administración del Condado de San Diego ni el gobierno federal simpatizaban con la idea, porque no era algo popular sino una necesidad de salud.

Promovió vivienda accesible

Otro hecho significativo para Andrea Skorepa, quien perdió el único intento por llegar a una regiduría con Bob Filner, fue haber iniciado las listas de miembros de la comunidad para que adquiriera vivienda accesible, por medio de la llamada sección 8.

Y fue justamente en vivienda donde alcanzó una de sus grandes satisfacciones, al contribuir de manera importante en la mejora y organización de las familias que residen en la Unidad Villanueva, una unidad que hasta antes de que lo administrara La Casa Familiar, afloraran sinnúmero de problemas y conflictos que se han ido resolviendo gradualmente.

Ahora Skorepa da una nueva sorpresa en su retiro: se despedirá con un baile que tendrá lugar el 5 de agosto en un hotel del centro de San Diego y al cual ha llamado “Andrea’s Abrazo”.

Horacio Rentería

Ellatinoonline.com