“Yo he rodado de aquí para allá, fui de todo y sin medida, pero te juro por Dios que nunca lloraré por lo que fue mi vida”, se afirma en un párrafo de la canción interpretada por José José, quien el sábado 28 de septiembre falleció, a los 71 años de edad, a consecuencia de cáncer de páncreas y el cual le llegó a la mayor parte de los órganos de su cuerpo.

Pero lo que quizás jamás imaginó el llamado Príncipe de la Canción, es que aún su cuerpo sin vida “rodara de aquí para allá”, al menos en la explicación que ya han dado a la prensa sus hijos José Joel y Marysol Estrella, ambos producto de su matrimonio con Annel.

Lo cierto que la mañana de este lunes (30 de septiembre), ni en la funeraria en la que supuestamente estaba su cuerpo, ni en el hospital que atendieron al cantante ni la policía, les informaron a los hermanos de dónde se encontraba, manejando en algunos medios de prensa una sorprendente cabeza: En Misterio total.

Y la explicación es muy clara: La negativa a que lo vieran por parte de su segunda hija que el cantante tuvo con Sara, (la segunda esposa del artista) conocida precisamente como Sarita y a quien José Joel y Marysol culpan de que no los dejara ver a su padre desde hace año y medio.

Aunque Sarita afirmó en una entrevista con la directora del programa de Telemundo, María Celeste Arrarás, que ella nunca se había opuesto a que los hermanos vieran a sus hermanos, la crisis familiar y desencuentros parecía la de una crónica anunciada y a punto de explotar.

Y es que los medios del espectáculo en múltiples ocasiones han dado cuenta de ello, agregando que el fondo de las diferencias se encontraba en la herencia, producto de las regalías (como ocurre en el caso de otro ídolo de la música mexicana, Juan Gabriel) que corresponden a José Rómulo Sosa Ortiz, mejor conocido como José José.

“¿Qué al fin te lo han contado, no? Seguro que te han dicho: Ten cuidado, que un hombre como yo, acaba por volver a su pasado”, es una melodía magistralmente interpretado por el cantante de la voz inigualable, pero el pasado de José José se inscribió en medio de la pena y su despedida definitiva está aún pendiente de que se sepa en dónde está su cuerpo y en qué lugar será sepultado.

Finalmente podría suponerse que al interés que atribuyen además del encono familiar por la herencia, la lógica manzana de la discordia estaría entre quienes quisieran que fuera enterrado o cremado en Florida (Sara y su hija, Sarita) y quienes quieren que sea llevado a México, su país natal (José Joel y Marysol), quienes entre paréntesis ya han demandado a su hermana Sarita y su madre.

Cualquier semejanza con el final de la vida de Juan Gabriel y Pedro Infante ¿es mera coincidencia?