Marely Ramírez de Indivisible San Diego. Fotos: Manuel Ocaño.

Unos 500 manifestantes llevaron a cabo en San Diego la primera de 465 protestas en todo el país en apoyo al proceso de juicio político contra el presidente Donald Trump.

Grupos de demócratas e independientes que quieren la destitución del presidente se reunieron ante el edificio de gobierno del condado de San Diego.

Marely Ramírez, la dirigente de Indivisible San Diego Persist, que convocó localmente a la protesta, confirmó a El Latino que fue la primera de cientos de protestas que tuvieron lugar en diversas ciudades en el país entre el domingo y el martes con el nombre de “Nadie por encima de la ley”.

La cámara de representantes presentó la propuesta de juicio político al presidente al pleno del congreso el miércoles.

“Somos millones de ciudadanos que apoyamos el juicio político y que Donald Trump deje la presidencia”, dijo Ramírez. Agregó que “la democracia es lo más importante que tenemos y por lo tanto tenemos que defenderla”.

El juicio se llevará a cabo en las siguientes semanas en el senado, donde la mayoría republicana cierra filas con el presidente y desde ahora el presidente de esa bancada, Mitch McConnell, ha advertido que “no hay manera en que el presidente vaya a dejar el cargo”.

Sin embargo “es nuestra obligación presionar a los senadores indecisos o que son moderados, para que voten a favor de la nación y del cambio, no en apoyo al Partido Republicano”, dijo la dirigente.

En la protesta algunos activistas inflaron el globo “baby Trump” pero sin elevarlo. William Johnson explicó que la cantidad de gas helio que se necesita para elevar el globo cuesta aproximadamente mil 500 dólares y esta vez ninguna organización ofreció apoyar.

Algunos manifestantes portaban pancartas con frases del doctor Martin Luther King, mientras que otros tenían mensajes en que pedían la destitución de Trump a Santa Claus en esta navidad.

Un supervisor del condado, Nathan Fletcher, declaró al podio que “Donald Trump es fundamentalmente inconsistente con los valores de Estados Unidos, un presidente que gobierna con el sexismo, el racismo y la xenofobia no tiene lugar en la Casa Blanca”, dijo entre muestras de apoyo.

Sin embargo Fletcher no mencionó la destitución del mandatario, sino que dijo que tanto el presidente como aquellos que lo apoyen “deber ser derrotados en la próxima elección”, es decir en noviembre del 2020.

De acuerdo con el supervisor, el presidente de cualquier modo debe ser destituido “porque utilizó fondos públicos de los contribuyentes para sobornar a un poder extranjero en su interés político personal”, dijo Fletcher.

Dijo que destituir al presidente confirmaría al mundo que nuestro país no está a la venta ni se puede regir por capricho o decisión personal que lo haría un rey.

Luego de la protesta inicial, hubo tres más en el condado en Escondido, en Encinita y en Temecula, todas el martes.