Los votantes latinos en cinco estados claves en las elecciones de noviembre dan prioridad a la reforma educativa sobre la inmigración, aunque por detrás del empleo, según una encuesta publicada este martes.

El sondeo dado a conocer por la American Federation for Children (AFC) y el Consejo Hispano para la Reforma y las Opciones Educativas (HCREO) muestra que los hispanos, por delante del resto de votantes estadounidenses, apoyan más oportunidades en educación primaria y secundaria.

Según la encuesta realizada por el centro Beck a más de 300 hispanos registrados para votar en los estados de Arizona, Florida, Nuevo México, Nueva Jersey y Nevada, estados claves de las elecciones presidenciales y con predominio latino, la comunidad hispana está muy pendiente de las propuestas educativas.

Según indicó en rueda de prensa Alberto Collazo, responsable de comunicación de HCRE, «la educación tiene una gran importancia para la comunidad latina ya que es clave para mejorar su futuro y las perspectivas económicas», y es algo que no debería depender del nivel de ingresos o el lugar donde se reside.

Tan sólo el empleo y la economía tendrán más peso para los latinos estadounidenses que voten en las elecciones de noviembre en las que el presidente Barack Obama se juega su reelección, según los datos recopilados en esos cinco estados.

El 88 por ciento de los latinos citaron la educación como un tema prioritario (por encima del 83 por ciento del total), mientras por delante se situó el empleo y la economía, con un 94 por ciento, por delante de los asuntos migratorios.

Un 58 por ciento de los encuestados considera que es necesario que los candidatos presidenciales hablen más sobre educación, especialmente sobre becas y facilidades para el acceso a la educación elemental y secundaria de calidad.

«La educación será una parte fundamental del discurso de campaña en los próximos meses», indicó Kevin Chavous, consejero de la AFC, quien recordó que los latinos serán una voz clave en el futuro de las reformas del sistema educativo.

La encuesta muestra que la comunidad latina apoya con más rotundidad que el resto de votantes las medidas para facilitar el acceso educativo previo a la universidad, como becas, facilidades en las escuelas privadas o beneficios fiscales.

La comunidad hispana es más favorable que el resto de los votantes estadounidenses a que las escuelas compitan para mejorar la calidad educativa, al tiempo que apoyan mejoras salariales para los profesores.