(Family Features) Se preguntará si es importante cuidar los primeros dientes de su hijo, los cuales se caerán en su niñez. Sin embargo, para tener dientes saludables de adultos, se deben tener dientes saludables durante la niñez. Es por eso que cuidar la salud bucal de los niños puede ayudar a proteger los dientes durante décadas.

Los primeros 20 dientes principales del bebé ya están presentes en la mandíbula al nacer. Los dientes de leche que comienzan a salir por las encías a aproximadamente los seis meses de edad sientan las bases de futuras sonrisas al dejar lugar en la mandíbula para los dientes de adultos. La Asociación Dental Estadounidense recomienda a los padres llevar a los niños al dentista antes de cumplir un año y luego en los intervalos recomendados por el dentista.

Para ayudarle a garantizar que está bien preparado para darle a su pequeño una buena salud dental durante toda la vida, los expertos de Ameritas ofrecen la siguiente información sobre los principales temas de salud bucal de los más pequeños:

Caries. La caries de la niñez temprana es la principal enfermedad crónica que afecta a los niños pequeños. Es cinco veces más común que el asma y siete veces más común que la rinitis alérgica. Como consecuencia del dolor de los dientes, los niños podrían faltar a la escuela o se podrían distraer en su aprendizaje.

El consumo de alimentos con azúcar, gaseosas, jugos o bebidas energéticas aumenta el riesgo de caída de los dientes y enfermedad periodontal; por lo tanto, la reducción de estas afecciones es un aspecto importante de la salud dental. Además es importante lavar siempre los dientes dos veces por día durante dos minutos y usar hilo dental una vez al día.

Otra opción para proteger los dientes de los niños es el uso de selladores, los cuales actúan como barreras para proteger las áreas propensas a bacterias. Estos se aplican a las superficies de masticación de los molares después de que los dientes brotan y están completamente por encima de la encía. Los dientes primarios y permanentes se pueden beneficiar con los selladores.

Lesiones deportivas. Los protectores bucales pueden ayudar a proteger a los niños de una emergencia dental. Se deben usar cada vez que los niños participan en actividades deportivas y recreativas. Los protectores bucales amortiguan los golpes que de otro modo podrían ocasionar ruptura de dientes, lesiones en los labios y el rostro, e incluso fracturas de mandíbula. Los protectores bucales se venden en diversas tiendas de venta minorista o pueden ser fabricados a la medida por el dentista.

Problemas de mandíbula y para morder. La maloclusión, o mordedura torcida, es una afección en la cual los dientes están encimados, torcidos, mal alineados o la mandíbula no cierra correctamente. Puede ser particularmente perceptible entre los 6 y 12 años, cuando se están desarrollando los dientes permanentes del niño.

Si no se trata a tiempo, la maloclusión puede hacer que sea más difícil mantener limpios los dientes y las encías donde se encuentran encimados o torcidos, lo cual aumenta el riesgo de contraer caries y enfermedad periodontal. La maloclusión también puede afectar el desarrollo adecuado de la mandíbula, donde se pueden producir fracturas y quiebre de los dientes que sobresalen. También puede afectar el comer y hablar, y algunos dientes se pueden desgastar de manera anormal o con mayor rapidez que aquellos que están alineados correctamente.

Enseñar a los niños buenos hábitos de higiene oral desde temprana edad es una manera simple de obtener sonrisas felices y saludables. Recuerde que modelar sus buenos hábitos de higiene oral no solo refuerza los consejos, sino que además mejora la propia salud dental.

Para obtener más información sobre la visita de salud dental de sus hijos, consulte la sección dental en www.ameritasinsight.com, donde además encontrará la manera en que las recientes reformas de atención médica afectan el seguro dental.