De forma singular, jugadores de Boston Red Sox (Medias Rojas de Boston), celebran la victoria. Foto-Cortesia: nbcsports.com/Maddle Meyer/Getty Images.

MILWUAKEE.- Los Angeles Dodgers llegan por segunda ocasión consecutiva a la Serie Mundial 2018, después de superar grandes desafíos, pero el más importante comenzaría el martes 23 en el arranque del Clásico de Otoño, en el Fenway Park de Boston.

Enfrentar al mejor equipo de las grandes ligas, Boston Red Sox (Medias Rojas de Boston) que en la temporada regular obtuvo 108 victorias (16 más que los Dodgers), será para los angelinos el desafío más grande que enfrentarán, pues aún traen clavada la espina que les pincharon los Astros de Houston (Houston Astros), al derrotarlos en siete juegos.

Esos Astros que fueron eliminados fácilmente por los Medias Rojas de Boston, ‘el superfavorito’ y que tiene la ventaja de cerrar la serie en casa, gracias a su excelente récord obtenido en la temporada regular.

Pero también los Dodgers tienen una historia que contar, pues luego de dar cuenta, con gran facilidad de los Bravos de Atlante (Atlante Braves), supieron sobreponerse a una sexta derrota (2-7) y a jugar sus dos últimos partidos en casa de los Cerveceros de Milwaukee (Milwaukee Brewers), para llevarse una meritoria victoria por 5-1 y con ello agenciarse el boleto para estar presente en la Serie Mundial 2018.

Para llegar  a esta instancia, sin embargo, tuvieron que sacar todo ‘el fua’ y su mejor versión en el juego del sábado 20 de octubre.

En la mente de los aficionados quedará el toque sorpresivo del venezolano Manny Machado, el mismo que había sido abucheado por los aficionados de los Cerveceros, por sus barridas en segunda base – cuando nadie lo esperaba, que luego  sería remolcado por el poderoso batazo de Cody Bellinger, el mismo que había definido con un inatrapable el cuarto juego, que se había ido a 13 entradas en el Dodger Stadium, dándole la victoria al lanzador mexicano Julio Urías.

Y fue Urías, precisamente, el que en el juego decisivo (séptimo partido), obtuvo el trébol de cuatro hojas, cuando su compañero Chris Taylor, quien jugando la pradera izquierda, corrió con convicción y de espaldas al ‘homeplate’, cuando ya parecía haber sido ‘techado’ por un tremendo batazo de Christian Yelich,  para lograr una atrapada increíble, que podría quedar en los récords de las series mundiales, tal y como se recuerda aquella que Tomy Agee hizo ante los Orioles de Baltimore (Baltimore Oriols), en 1969, en lo que se llamó Los Milagrosos Mets.

Lo grandioso del hecho es que el mexicano Urías estuvo en ese partido con la pena de saber que su abuelo había fallecido y sólo hizo, en el cierre de la quinta entrada, tres lanzamiento al único bateador, Yelich, quien con dos ‘strikes’, le pescó la tercera y que  dio lugar al engarce salvador de Yelich.

Luego,  la historia compensaría a los Dodgers y levantaría la moral de Julio Urías, pues con dos hombre en base y un apretado juego a su favor (2-1), el siempre polémico Yasiel Puig ‘cazó’ un lanzamiento del pitcher de los Cerveceros,  Jeremy Jeffres, para depositarla del otro lado de la cerca, y poner el definitivo 5-1.

Ahora, los Dodgers buscarán reinvindicarse de su dolorosa derrota del año pasado (Serie Mundial 2017), pero su desafío no será nada fácil. ¿Ahora si lo lograrán?.