Al incrementarse los paseos a lugares de recreación acuática y el uso de las piscinas particulares, la comunidad debe a mantenerse cautelosa y atenta. Foto: Archivo

Al ser el ahogamiento la causa más común de muerte entre menores de 1 y 4 años de edad, y ser la segunda causa de muerte no intencional en la población de entre 5 y 14 años, por encima de otros motivos como lesiones después de accidentes automovilísticos, de acuerdo al Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), el reiterado recordatorio  de medidas de seguridad que prevengan tragedias es imprescindible para especialistas de instancias como LaSalle Medical Associates.

Al incrementarse los paseos a lugares de recreación acuática y el uso de las piscinas particulares durante los días calurosos, la comunidad debe a mantenerse cautelosa y atenta, independientemente del tamaño de las piscinas, pues incluso aquellas inflables de menos de un pie de profundidad representan un peligro.

“El niño promedio de 2 años mide de dos y medio a tres pies de altura, por lo que, si bien una piscina para niños parece segura para un adulto, es un peligro para un niño pequeño”, informó Albert Arteaga, presidente, y CEO de LaSalle Medical Associates Inc.

“Los niños pequeños pueden ahogarse en unas pocas pulgadas de agua, por lo que los padres, abuelos y niñeras deben prestar atención a los niños que se encuentran alrededor de piscinas de cualquier tamaño”.

“Ahogarse puede convertirse en una tragedia, pero es una de las más evitables” , dice Arteaga.

11 MUERTES POR DÍA EN PROMEDIO

El CDC hace énfasis en su comunicado sobre la cifra anual de 4,000 ahogamientos fatales no intencionales, un promedio de 11 muertes por día. Otros ahogamientos no fatales agregan 4,000 incidentes más en los que la víctima sobrevive, pero sufre problemas de salud a largo plazo e incurre en costosas hospitalizaciones.

“Nadar puede ser engañoso”, dice Barbara Graber, coordinadora de Educación y Auditoría de LaSalle. “Nosotros, como adultos, nos volvemos complacientes porque los niños se divierten o nos sentimos cómodos en nuestro entorno en ese momento. Pero las piscinas son potencialmente peligrosas para los niños y debemos tener esto en cuenta todo el tiempo”.

LA PIEL. OTRA VÍCTIMA

Además de la seguridad en la piscina, LaSalle también alienta a los residentes locales a proteger su piel mientras disfrutan del sol al aire libre.

“Más tiempo en la piscina significa más tiempo bajo el sol y el sol puede causar quemaduras solares graves que incluso pueden conducir a varios niveles de cáncer de piel más adelante en la vida”, dice Graber.

Graber sugiere usar protector solar con un SPF de al menos 15, que detendrá el 93 por ciento de los dañinos rayos ultravioleta del sol y recordar aplicar nuevamente después de nadar.

RECOMENDACIONES DE PREVENCIÓN

  • Aprenda habilidades de natación de supervivencia
  • Evite el uso de alcohol mientras nada o supervisa a los niños cerca del agua
  • Designe a un adulto responsable para que vigile a los niños pequeños mientras nadan o juegan en el agua o cerca de ella
  • Nunca deje que los niños mayores estén a cargo de los niños más pequeños en las áreas de la piscina
  • Coloque una cerca alrededor de las piscinas o spas con una puerta que se cierre con llave
  • Mantenga la puerta cerrada y bloqueada en todo momento
  • Nunca nade solo
  • Mantenga un teléfono inalámbrico resistente al agua cerca de la piscina en caso de emergencia
  • Los padres que buscan comprar piscinas pequeñas y portátiles, como una piscina para niños, deben considerar aquellas con lados lo suficientemente rígidos para que los niños las agarren
  • Preferir piscina de superficie resistente para evitar resbalones