Las cámaras de vigilancia que se instalarán grabarán imágenes sin audio. Foto: José Antonio Avilés

SAN DIEGO.- Cámaras con tecnología automática para leer placas de unidades

vehiculares así como la implementación de alumbrado público inteligente serán instalados

en diferentes puntos de San Diego.

El plan fue aprobado por el Concejo Municipal con mayoría de votos y de esta manera se

dio el visto bueno a la propuesta realizada por el Departamento de Policía de la ciudad.

“Las cámaras no se mueven son estáticas entonces solo pueden ver lo que está

ocurriendo enfrente de ellas y son importantes porque cuando ocurre un crimen los

oficiales pueden ir a bajar la cámara que está grabando y buscar el tiempo donde ocurrió

el incidente para ver si pueden ver una descripción sospechosa de un vehículo para poder

investigar”, destacó José Ysea, vocero de la ciudad de San Diego.

Quinientas cámaras de vigilancia se instalarán en puntos donde se registran

frecuentemente delitos como robos, problemas con pandillas o incluso homicidios pero

hasta el pasado martes, no se dieron a conocer las zonas donde serán

colocadas.

Con este plan, San Diego se convertirá en la ciudad más grande de Estados Unidos en

contar con innovadores lectores de matrículas.

“Solamente graban video no graban audio, no tienen zoom, nadie las está controlando

solo están solas y graban de 10 a 15 días y luego se vuelve a grabar encima de eso”,

informó el vocero de la ciudad.

GENERA POLÉMICA

La aprobación del uso de esta tecnología ha generado polémica entre autoridades y

habitantes por el tema de la privacidad. Durante la sesión del Concejo Municipal de San

Diego, Monica Montgomery Steppe y Sean Elo-Rivera votaron en contra de poner en

funcionamiento las nuevas cámaras.

“Es algo delicado porque pueden invadir nuestra privacidad”, consideró Julie Sean,

residente de la ciudad.

Sin embargo, representantes de la ciudad aseguraron que únicamente se pretende hacer

uso de los aparatos como herramienta de apoyo para brindar mayor seguridad a la

población.

Una vez que se apruebe el contrato, la ciudad de San Diego determinará la compañía que

instalará las 500 cámaras con lectores automáticos de matrículas.