CORONADO.- “Si no se le pone un alto, si no se aplican soluciones inmediatas y eficientes esto se hará una emergencia ambiental y de salud pública, y estamos a nada de que esto suceda”, advirtió Marely Ramírez, respecto a los altos niveles de contaminación que enfrentan las playas de Coronado a consecuencia de los desagües realizados en Baja California y que han llegado a afectar de forma alarmante todas las playas de South Bay.

“Esta manifestación es un llamado comunitario para levantar la voz sobre el tema de la contaminación tan alta que tenemos en las playas de Coronado y, al mismo tiempo, presionar a nuestros gobiernos para que hagan algo. Lo que han hecho no ha sido suficiente, es momento de acelerar el proceso de controlar el desagüe fecal de Tijuana”, advirtió Ramírez, quien reside desde hace 11 años en esta ciudad.
Fue la mañana del sábado que residentes de Coronado se reunieron frente a la playa para manifestar su preocupación y molestia ante el problema que cada vez se agudiza y afecta a la comunidad.
“Va a devastar la playa. Es una emergencia de salud pública. Nuestros Navy SEAL entrenan en esta agua, nuestros niños nadan en esta agua. Esto no es aceptable”, dijo Laura Wilkinson Sinton, parte del grupo de manifestantes.

Visiblemente preocupados, los vecinos, refirieron que el riesgo de salud rebasa a una comunidad, pues impacta en la salud de los 3,5 millones de visitantes que llegan a estas playas al año.
“Esta es una crisis de salud pública, todo visitante local, regional, incluso del extranjero si no está consciente de la cantidad de contaminación que hay en el agua puede infectarse, esto puede ser fatal para algunas personas”, refirió Marely Ramírez. “Llegan familias con niños, bebés, jóvenes, si alguno de ellos trae una cortada o tienen alguna condición médica es inevitable que contraigan una infección”.

El alcalde de Coronado, Richard Bailey, quien se hizo presente en el lugar, explicó que ya hay un “estigma en South Bay de que 12 millas de costa están fuera de los rangos considerados como no peligrosos y eso es algo que nos tomamos muy en serio en Coronado”.
Precisó que “en 2020, la Agencia de Protección Ambiental de EE. UU. comprometió $300 millones para mitigar la contaminación por flujo transfronterizo, pero que son necesarios otros $300 millones para un proyecto que trataría las aguas residuales que cruzan desde el Río Tijuana; pero hasta que veamos más acción por parte de los funcionarios federales, este problema no se resolverá”, dijo Bailey.

Pese a que las playas están cerradas al público, y se notifica de su grado de contaminación en letreros colocados en la torre principal de salvavidas y a lo largo de la playa, la gente acude para pasar un rato en familia, con amigos, hacer algún tipo de ejercicio o practicar un deporte, ignorando las advertencias.