SANTA ANA, CA.- Tras los hechos de violencia registrados en escuelas del país, en California se empiezan a tomar las primeras medidas concretas para hacerle frente a este dilema.
Concretamente, los miembros que integran la Junta de Supervisores del Condado de Orange aprobaron un contrato por $4 millones para hacer funcionar un proyecto de reducción de la violencia en las escuelas, que contempla capacitación de personal “para tratar tiradores adictivos”.
El acuerdo fue firmado entre los integrantes de la Junta de Supervisores y autoridades del Departamento de Educación del Condado de Orange.
De hecho, se informó que el condado ha contado con un programa de educación para la prevención de la violencia en la escuela que data de 2013, pero este año se está capacitando para tiradores.
El programa incluye el suministro de expertos en «respuesta a crisis» para emergencias, educación y capacitación sobre cómo la violencia puede afectar de desarrollo del cerebro de un niño, servicios contra la intimidación y formas de ayudar a los estudiantes lidian con “comportamientos de alto riesgo» y el estrés relacionado con « trauma y o violencia», según un informe del personal.
El entrenamiento de tirador activo incluirá “foros comunitarios, activos ejercicios de simulacro de simulacro de tirador y entrenamiento proactivo de evaluación de amenazas, de acuerdo con un informe del personal. Administradores escolares, maestros, policías del campus y otros miembros del personal será entrenado para evaluar y responder a las amenazas.
El entrenamiento vendrá de las agencias policiales locales, los ayudantes del sheriff del Condado de Orange, oficiales de libertad condicional, fiscales, el FBI, otros primeros en responder y expertos en salud mental.